En el diseño el contraste del blanco y el negro es el eje central. El trabajo fotográfico de Massimo Sbreni transmite los valores de experiencia y diferenciación. Los rostros de los diferentes perfiles del mundo son la metáfora que representa la interconexión de la era digital, pues la especialidad de la casa son las redes sociales.
La producción gráfica de la tarjeta de visita, en realidad 19 modelos, debía plantearse con los valores mencionados.
Era fundamental que las imágenes mantuvieran la riqueza de contrastes y no se perdieran los detalles de la piel y los tejidos. Todo ello impreso en offset en un papel natural con una ligera textura rugosa. La porosidad de este soporte complicaba el desarrollo.
Por otro lado había que transmitir la rigidez de los valores de la marca. Esto se consiguió con un contracolado sándwich con el que alcanzamos los 710 g.
Para equilibrar el peso del conjunto optamos además por un segundo papel, característico por su tacto, que remitiera al lado más amable de la comunicación, a la calidez de las relaciones humanas.